En este mundo, existen espíritus astutos, dioses de ríos, poderosos demonios… y cultivadores que buscan los secretos de la longevidad. Si un cultivador abre su Ojo del Darma Verdadero, podrá ver demonios y espíritus ocultos. Si un cultivador refina una espada voladora, podrá abatir a sus enemigos a cientos de kilómetros de distancia. Su clarividencia y agudo oído les facilitan la exploración del mundo… Y el Joven Maestro Qin Yun de la Familia Qin es uno de esos cultivadores…